El Clamor del Espíritu Isaías 40:3 – “Voz que clama en el desierto: Preparad camino a Jehová; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios.” Hemos sido convocados a clamar por 39 dias consecutivos del 25 de junio al 2 de agosto. Cada día de clamor que tendremos se transforma en una operación del cielo sobre el sistema vital de América para “Revivir el Corazón” con el fuego del Espíritu. Cada proclama es una orden de emergencia desde el Trono del padre celestial. Y cada clamor, una activación profética que comienza a abrir los conductos del continente al movimiento de justicia y por ende a la gloria de Dios. En las Escrituras, el clamor no es una reacción emocional o una súplica desesperada: es un lenguaje judicial, espiritual y profético. Es la voz que atraviesa el ruido de la tierra y el recurso legítimo que un hijo presenta ante el Rey y Juez supremo cuando la tierra ha sido tomada por la injusticia. “Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grande...
Convertirse en un intercesor profético es un llamado profundo y transformador que tiene el potencial de cambiar significativamente tu vida y la vida de quienes te rodean. A través de la intercesión profética , no solo te conectas con Dios más profundamente, sino que también juegas un papel crucial al traer cambio y transformación a tu comunidad y más allá. Para Continuar, verás algunos de los resultados que puedes esperar si emprendes este viaje de transformación. 1. Relación con Dios. Uno de los profundos beneficios inmediatos de la intercesión profética es el fortalecimiento de tu relación personal con Dios. Al dedicar tiempo a la oración y a la escuchar la voz de tu Padre celestial, puedes desarrollar una relación más íntima .con Él. Como dijo el profeta David:"El Señor es mi roca, mi fortaleza y mi libertador; mi Dios, mi peña, en quien me refugio". (Salmo 18:2). Esto te permitirá discernir mej...